Una duda taladraba su cabeza y enredada en esa espiral intentaba concentrarse en quitar, escrupulosamente, la última brizna de esa judía verde a punto de entrar en la cazuela. La duda era ya un punzón que se clavaba en su cerebro. Hastiada soltó el cuchillo sobre la encimera de la cocina, saboreó, (esta vez) sin sentirse culpable, dos cucharadas de crema de cacao, y se dirigió al desván. Comprobó la correcta longitud de la cuerda colgando de la viga y la posición de la silla. Todo estaba preparado pero antes, debía terminar la comida para sus indiferentes e insensibles deudos.
Publicado en la Asociación Solidaria Cinco Palabras:
Palabras a incluir regaladas por:
MIGUEL A. PALMER, DIRECTIVO DE @LONGINES – REGIONAL BRAND MANAGER AMÉRICA Y MÉXICO
DUDA - ESPIRAL - BRIZNA - PUNZÓN - CACAO
Causa Solidaria del mes de Noviembre:
BODHI TREE EDUCATIONAL FOUNDATION
Publicado también en POÉMAME:
Un relato que impone por lo que está a punto de ocurrir.Besicos
ResponderEliminarUna cruda realidad...
EliminarMuchas gracias, por tu visita, CHARO.
Besicos
¡¡coñ*!! qué me lo has hecho vivir; tal cual te digo ...
ResponderEliminarincluso me han dado escalofríos
y soy montañés de La Montaña - Cantabria - EspaÑa
IMAGINA || beso, te || merci por ser y por estar || tan ... ¿con las manos en la masa?
pregunto con sana curiosidad gatuna || o no tan sana.
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Ella está inmersa en su desesperanza. Aún así, siente la necesidad de cumplir con lo que considera su obligación. Aunque que tal vez ellos no supieron ver el dolor que le arrastra.
EliminarMuchas gracias por tu lectura.
Hasta el ultimo momento cumpliría con su obligación. Un texto que da mucho que pensar. Saludos amiga.
ResponderEliminarHasta el último momento, tú lo has dicho.
EliminarMuchas gracias, Sandra.
Besicos
Qué fuerte. Cumpliendo con el deber hasta el final.
ResponderEliminarMuy buen texto. Un abrazo
Cumpliendo con ella misma y los suyos. Aunque quizá no supieron entenderla o no prestaron atención, mientras ella iba consumiéndose en Soledad.
EliminarMuchas gracias por tu lectura, Alba.
Besicos.
Es encomiable tu labor narrativa, apreciada Galilea, ya que has construido un estupendo microrrelato con un final francamente aterrador y todo ello siguiendo las pautas de este nuevo reto solidario. ¡Te ha quedado genial!
ResponderEliminarBesos.
Qué alegría que te haya gustado. Muchas gracias por tu visita, Estrella.
EliminarBesicos
Que duro el final... Responsable hasta ese supuesto último momento.
ResponderEliminarUn saludo.
En su adjudicado papel y también en Soledad.
EliminarMuchas gracias, Ne.
Besicos
El detalle, los detalles, no son ajenos a ninguna propuesta. Excelente relato. De los que te hacen elevar el sentimiento!¡
ResponderEliminarUn beso Galilea
Así es, una vida se sustenta con mil detalles. La obligación y el compromiso... "Detalles".
EliminarLa soledad, la indiferencia, "detalles" que rodean su vida y llegan a tocar la desesperación y a quiere irse. Pero acostumbrada a cumplir con los "detalles"... su papel y sus obligaciones, antes dejará la comida preparada. Posiblemente cree que es "el detalle" que esperan de ella. Quizá lo único. Esa crueldad y esa incomprensión... son "detalles" le han vencido.
Muchas gracias siempre por tu lectura, don dumas.
Siempre cumpliendo hasta el final...
ResponderEliminarTriste relato...
A veces, un ¿cómo estás? puede llegar a salvar vidas.
Besicos.
Siempre cumpliendo fielmente... y a la espera quizá, de ese "¿cómo estás?"
EliminarMuchas gracias por tu vista, Laura
Besicos
Hola Galilea! paseando por los blogs amigos me encuentro con el tuyo y me gusta, con tu permiso me quedo en el y te invito al mio si te apetece pasar. Tremendo y triste tu relato ¿Hasta qué punto estaba hastiada?.
ResponderEliminarSaluditos.
Hasta ese triste punto y final. Sí... es tremendo llegar a ese extremo. Hay que aprender a huir a tiempo.
EliminarDecirte que estoy encantada de recibirte. Gracias por invitarme a tu rinconcito. Ahora mismo paso a leerte.
Besicos.